sábado, 28 de enero de 2012

Amores que matan, nunca mueren.

Siete meses a tu lado... Bueno, ojalá pudiera decir "a tu lado" pero la verdad es que entre tú y yo acostumbra a haber más de mil kilómetros. Y eso que odio cada centímetro que me separa de tu piel...
Pero en fin, han pasado siete meses desde aquel día que por primera vez, me abrazaste y te besé. Desde que te vi a lo lejos y ya me gustaste más que nadie. Desde que te llevaba de la mano por las calles de un Burgos que es frío hasta en verano. Y siete meses desde que empecé a sentir esto tan fuerte que sólo me deja pensar en ti y echarte de menos cada minuto, esto que se podría llamar "amor" pero que es algo que va mucho más allá, esto que va creciendo y creciendo por cada día que pasa...
Y es duro estar sin ti, y yo no soy demasiado fuerte, pero tengo tan claro que eres para mi y que sólo voy a poder estar contigo que aguantaré todo, todo lo que sea por volver a estar contigo otro día. Saber que algún día tendremos nuestra vida y que mi cama dejará de estar vacía cada noche. Vacía y triste. Porque son muchas las lágrimas por ti, porque no soporto ver cómo te alejas, porque siempre tengo miedo de que esa sea la última vez que te vea....
Diciéndome adiós con la mano a través de una ventanilla. Y vuelta a lo de siempre.
Y me hundo cuando te vas, y sólo cuento segundos para volverte a ver. Pero cuando estoy contigo, desaparecen todos mis problemas, se acaban las preocupaciones y son las únicas veces que puedo decir que soy feliz.
Te necesito tanto...
Y quiero pasarme una eternidad besándote. Sólo a ti.
Eres mi mundo, eres todo lo que tengo. Siempre, siempre, siempre.
Muchas gracias por estos siete meses. Y muchísimas gracias por los que están por venir.
TE AMO.

Y morirme contigo si te matas, y matarme contigo si te mueres.